Sandra Karina Perez

Sandra Karina Pérez Nació el 4 de mayo de 1982 en San Salvador, El Salvador. Es hija de Manuel Álvaro Madrid Villalta y Blanca Reina Oliva de Madrid. Se casó por tiempo y eternidad con Jaime Ricardo Pérez en el Templo de Salt Lake City el 1º de febrero de 2008. Falleció el 26 de Marzo de 2016 en la ciudad de Murray, Utah. Honor a quien honor merece. Karina Pérez (Madrid Oliva) desde su niñez se destacó como líder. A sus tiernos 3 años se convirtió en reina del kindergarten donde recibió su educación parvularia. Durante sus años escolares de primaria se mantuvo en primer lugar en cada uno de los grados que estudió. Su alegría y bella sonrisa es otra de sus características desde su niñez, era amigable y socializaba con toda la gente a su alrededor, al punto de que la familia Madrid era conocida gracias a Karina. Solían decir: “Ah, ustedes son los padres de Karina, los hermanos de Karina, los primos de Karina, etc.” Asimismo se mantuvo en el primer lugar en el bachillerato, donde a su ingreso fue elegida por votación como presidenta del gremio estudiantil y, según lo manifiestan sus compañeros, la eligieron con un entusiasmo unánime, y ganó también los certámenes de composición. Siempre se destacó por su jovialidad y como dicen sus amigos, lo triste lo convertía en alegría. Mantuvo su espíritu de servicio y ayuda al prójimo cuando se convirtió en adulta. Contribuyó enormemente en las organizaciones en las que desempeño su trabajo, que son organizaciones sin fines de lucro para ayudar a la comunidad, ganándose el cariño, la admiración y el respeto no sólo del personal administrativo de la organización, sino también de las personas a quienes prestaba ayuda. Se destacó como líder en distintos llamamientos dentro de la Iglesia. Cuando era líder regional de los Jóvenes Adultos Solteros, los mismos le bromeaban llamándola Alcaldesa o Autoridad General, pues por su forma de ser se ganaba el cariño y respeto de todos los miembros de la organización. Ellos cuentan que ella no se marchaba sin estrecharle la mano y despedirse de todos los que estaban a su alrededor. Su espíritu de hermanamiento se desarrolló a lo largo de su vida, y ayudó en el desarrollo de organizaciones, ramas y barrios. Fue una mujer con determinación, una mujer que lograba lo que se proponía, como cuando dijo: “El próximo año me caso”, y su padre le preguntaba: “¿Cómo te vas a casar si no tenés novio?”, y ella contestó: “Papi, ya te lo dije”. Así que Karina halló el amor de su vida y se casó tal como lo expresó. Karina tenía un afecto especial hacia los niños, y era un espectáculo verla arrullar a un bebé. Así que Karina añoraba desempeñar su papel de madre. Su sueño se hizo realidad con el nacimiento de Samuel, a quien llamaremos Samuel (no Samuelito) a petición de su propia madre. Su bella sonrisa, su cordialidad, su amor al prójimo, no tenían distinción de nacionalidad, raza, color, religión. Gracias a su ímpetu, su caridad, su liderazgo y su buena administración; sus amigos, compañeros, hermanos y conocidos la reconocen como un ser de luz, una persona fuera de serie, una verdadera representante de Jesucristo, en conclusión, un ángel. A tal punto llega su amor, admiración y respeto por ella, que muchos de sus amigos, conocidos y familiares se han congregado desde diferentes puntos geográficos para despedirse de ella en esta ocasión. Por todo esto no hay duda que Dios se llevó a un gran bastión para seguir trabajando con Él y para Él. Honor a quien honor merece. Mientras procuraba cumplir su sueño de ser madre nuevamente, Karina partió de este plano terrenal acompañada de sus hijos Benjamín y Mateo, junto a quienes seguirá laborando en el mundo de los espíritus. Su partida unos minutos antes del Domingo de Pascua de Resurrección quizás sea para recordarnos que la muerte no es para siempre y que algún día todos nos levantaremos del sepulcro como lo hizo nuestro Salvador en aquella mañana de primavera. Karina, todos los que te tuvimos con nosotros agradecemos a nuestro Padre Celestial el habernos permitido conocerte, amarte, abrazarte y disfrutar de todas las bondades y dones que Dios te dio. No te decimos adiós sino hasta que nos reunamos con el Rey. En este plano terrenal quedan su esposo, hijo (Samuel), sus padres, sus abuelas (Blanca y Dolores) y sus hermanos Álvaro (Elizabeth) y Alma (Robert) y sobrinos. El servicio funeral se efectuara el Viernes, 1ro de Abril, 2016, 11:00 a.m. en la capilla mormona, 3495 West 4850 South, Taylorsville, Utah. El velorio sera Jueves de 6:00 to 9:00 p.m. en el mismo lugar y tambien el Viernes 9:00 to 10:30 a.m. antes del funeral. El entierro sera en Valley View Memorial Park, West Valley City, Utah. Por favor compartan sus recuerdos en www.serenityfhs.com Sandra Karina Madrid Perez, 33, passed away on March 26, 2016, in Murray, Utah, after giving birth to twin boys, Mateo and Benjamin, who were born and passed away on March 25, 2016. She blessed everyone who had the pleasure to meet her and shared the many gifts God gave her through her love, kindness, and talents. Born May 4, 1982, in San Salvador, El Salvador, to Manuel Alvaro Madrid Villalta and Blanca Reina Oliva Garcia, Karina excelled as a leader since her childhood. From Kindergarten on, she performed at the top of her class and spread friendship with her beautiful smile. During junior high and high school, she continued succeeding academically and socially, unanimously elected class president. For all around her, she helped to change sadness to happiness. This same spirit of service continued into adulthood, contributing to the growth of the non-profit organizations where she worked and won the hearts and admiration of all with whom she came in contact. Karina was sealed to Jaime Ricardo Perez in the Salt Lake City Temple on February 1, 2008, and her husband and son Samuel were the loves of her life. She faithfully encouraged her husband to achieve his goals and dreams while, at the same time, she obtained B.A. and M.A. degrees in Social Work from the University of Utah. A faithful member of The Church of Jesus Christ of Latter-day Saints, Karina served as a leader in the Young Single Adult Hispanic region and enjoyed working with the Young Women of the Church, serving in both ward and stake Young Women presidencies. She never left a meeting without shaking everyone’s hands and served everyone without judgment in a spirit of service. Her friends, classmates, siblings, and acquaintances called her a being of light and an angelic representative of Jesus Christ. Heavenly Father called a great woman home to His presence to continue her work for and with Him. Honor to whom honor is due. While attempting to fulfill her dream of being a mother again, Karina left this earthly plane with her children, Benjamin and Mateo, with whom she will continue working in the spirit world. Her departure a few minutes before Easter Sunday is perhaps to remind us that death is not forever, and that one day we all will rise from the grave as did our Savior in that spring morning. Karina, all of us that had you with us thank our Heavenly Father for letting us know, love, embrace and enjoy all the benefits and gifts God gave you. We do not say goodbye, only “Till we meet again.” Sandra Karina Madrid Perez is survived and greatly loved by her husband, son (Samuel), parents, grandmothers (Blanca y Dolores), siblings, Alvaro (Elizabeth), Alma (Robert), nieces, nephews. Funeral services will be held Friday, April 1, 2016, 11:00 a.m. at the LDS Church, 3495 West 4850 South, Taylorsville, Utah. A viewing will be held Thursday evening from 6:00 to 9:00 p.m. at the same location and also Friday from 9:00 to 10:30 a.m. prior to the funeral under the direction of Serenity Funeral Home, Draper, Utah. Burial will be at Valley View Memorial Park, West Valley City, Utah. Please share memories and condolences at www.serenityfhs.com

Sandra Karina Perez

May 4, 1982 - March 26, 2016